jueves, 20 de noviembre de 2008

¡ Que alguien me responda !

Últimamente me han surgido muchas preguntas que por obvias que suenen nadie me da respuesta. De acuerdo al Diccionario de la Real Academia Española obvio significa algo que se encuentra o pone delante de los ojos, o que no tiene dificultad. Entonces, presuntamente debo saber de dónde debe venir la respuesta o cuál debe ser la acción, pero ya no estoy tan seguro de la claridad de las cosas.

Las interrogantes que me surgen son: ¿Por qué después de que hicieron tanto escándalo por la aprobación de la Reforma Electoral, con lo que se buscaba que nuestros recursos no fueran despilfarrados por los gobernantes, nadie detiene a Peña Nieto ni a Marcelo Ebrad con sus evidentes y cínicas campañas? ¿Qué hacen Fidel Herrera y Ulises Ruiz anunciando a nivel nacional lo que consideran sus logros? ¿No hay medios de comunicación en sus estados? ¿No para eso se alquilaron?

¿Por qué nadie denuncia a AMLO cuando la Constitución es clara al hablar de sublevación? ¿Por qué Bejarano vive en total impunidad y con un feliz regreso a la vida política, mientras Ahumada prácticamente salió huyendo del país? ¿Por qué el jet en el que viajaba el responsable de la seguridad nacional era conducido por un par de chafiretes? ¿Porqué “la maestra” no es un ejemplo a seguir? ¿Por qué espeluznantemente pienso que extrañaremos a Bush? ¿Por qué el América y el PRD sin Cuauhtémoc no son nada?

Que alguien me responda ¿Porqué no cambian al técnico de la Selección y por qué la mayoría de sus partidos se realizan en Estados Unidos? ¿Por qué nadie le ha dicho a Lucía Méndez que ya no tiene 18? y ¿Por qué Rebeca de Alba nunca sospechó que lo de Ricky, lo de Ricky…eran los úteros alquilados?

domingo, 9 de noviembre de 2008

Mi amigo desgracia

Quién sabe quién inventó el término de amigo pero cualquiera que haya sido su origen no creo sea el que le damos. Sin duda, es una palabra sobreestimada. Al hablar de amigos recuerdo que varias personas han dicho que lo son, otros que lo creen, otros que lo sienten y a otros a los que considero. A lo largo de la vida han pasado los que tuve, a los que quise, a los que mentí, a los que me usaron, a los que compartieron, con los que viajé, con los que estudié, con los que trabajé o simplemente me senté.

He escuchado que existen diversas categorías de amigos y me he cruzado con ellos, desde el amigo chancla, quien no es la gran cosa pero te sientes cómodo con su compañía, hasta el amigo vampiro, que sólo ves por las noches, en los antros, en las fiestas o saludas en la barra de bar; sin embargo nunca me había topado con un amigo desgracia. Sí, no quiere decir que si te reúnes con él te pase algo malo, sino que cuando están juntos ocurren cosas que provocan una desgracia a otros.

Haciendo un recuento, con ese amigo estuve en casos catastróficos, fue el mismo con el que me tocó ver la destrucción de las torres gemelas, me pasó a leer la nota del submarino ruso donde murieron más de cien personas en el 2000, fue quien me confirmó la reelección de Bush, fue uno de los primeros en llamarme para avisarme lo del Sunami, me marcó muy temprano cuando se produjo la explosión en Atocha, en Madrid, integraba el grupo de amigos con los estábamos en Playa del Carmen cuando se produjeron las inundaciones en Tabasco y es quien me acompañaba cuando me enteré del desplome de jet que cayó en Lomas de Chapultepec y donde resultaron tantos muertos; no digo su nombre porque es quizás ahí donde está el origen de la desgracia.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Mi primera vez

Estamos viviendo muchas primeras veces. Sí, la primera vez que hay un acto terrorista en un evento masivo; la primera vez que no hay un informe presidencial en años; la primera vez de una marcha nocturna contra la inseguridad; la primera vez que alguien que criminaliza la protesta social es recibido en un Congreso como Jefe de Estado, cuando quien es el Presidente Constitucional no tiene acceso; la primera vez que un hombre negro gobernará desde la Casa Blanca; y la primera vez que muere un Secretario de Gobernación y, en un accidente que provoca muertes y heridos.

Desde la semana pasada en mi mente no deja de saltar la frase que escribí en mi anterior comentario y que pertenece a Saramago, hoy lo reitero: “El mundo está hundido en la mierda y no se puede ser optimista; el que es optimista es estúpido o millonario”. El sentir popular es: “si eso le pasa al encargado de la seguridad nacional yo como ciudadano ¿a qué estoy expuesto?”. Simplemente sentimos que podemos ser heridos o lesionados físicamente porque moralmente ya lo estamos. Vulnerables, es la palabra, pero eso no debe tener el peso para echarnos las manos a la cara y sentarnos a esperar el fin, pues como dijo Leonardo Da Vinci: “El que no valora la vida no se la merece”.